Tratamientos de Parkinson

Tratamientos de Parkinson

Una vez diagnosticado con EP, su enfoque debe de estar en mejorar sus síntomas y mantener un estilo de vida activo y positivo. A pesar de que actualmente no existe una cura para la EP, es posible de tener éxito en el manejo de los síntomas a través de decisiones saludables, medicamentos, y en algunos casos, cirugía.

Los tratamientos necesitaran cambiar durante el curso de la enfermedad. En las primeras etapas, es importante mantener una actividad física constante, comer una dieta saludable, y poner atención a su salud mental. El tratamiento temprano con medicamentos puede ayudar a la mayoría de personas con EP a mantener un estilo de vida activo y continuar trabajando. Los medicamentos deben ser ajustados
durante el curso de la enfermedad, con el objetivo de mantener el mejor control de los síntomas y evitar los efectos secundarios. El ajuste de medicamentos puede ser complejo, y es una de las mayores razones para ser visto por un especialista en trastornos del movimiento.


Viviendo con la EP

Vivir con la EP implica abordar los síntomas a través de:
– El estilo de vida, incluyendo ejercicio regular y una dieta saludable
– Medicamentos y otros tratamientos
– Una red social de apoyo
– Una fuerte relación con su equipo suministrador de salud.


La Vida Diaria

Ejercicio y Actividades Diarias

En el manejo de la EP, su estilo de vida es uno de los primeros aspectos más importantes en los cuales quiere enfocar su atención. Empezar o continuar una rutina regular de ejercicio puede hacer una gran diferencia en su movilidad, a corto y largo plazo. De hecho, muchos estudios han demostrado que
las rutinas regulares de caminar, entrenamiento de fuerza, o Tai Chi pueden ayudar a mantener, o incluso mejorar, la movilidad, el balance y la coordinación en personas con EP. Personas con EP también reportan beneficios físicos (y mentales) con la natación, el ciclismo, baile, e incluso con el boxeo sin contacto.

Lo que sea que disfrute para mantenerse móvil es la mejor actividad para usted, ya que será más probable que permanezca comprometido. Generalmente hablando, en el caso de EP, entre más activo sea, más activo permanecerá.

Si usted no se ejercitaba antes de su diagnósis, o si usted no está seguro acerca del nivel de aptitud física o resistencia, hable primero con su médico de cabecera. Es importante que tenga un estado general de salud, específicamente una evaluación cardiaca antes de empezar cualquier tipo de
régimen de ejercicio. Además, un fisioterapeuta es un gran recurso para descubrir lo que su cuerpo puede tolerar y lo que puede hacer de manera segura en forma regular. Su médico primario o el neurólogo puede proporcionarle una referencia a un fisioterapeuta, si es necesario. Independientemente de su nivel de ejercicio, una evaluación temprana por un fisioterapeuta es probable que sea muy valioso. Entre otros beneficios, un fisioterapeuta puede ayudarle a personalizar su
régimen de ejercicios que mejor se ajuste a sus necesidades y su capacidad.

El Centro de Rehabilitación de la APDA en la Universidad de Boston fue establecido para ayudar a las personas con EP a obtener acceso a la información acerca de las recomendaciones físicas y de ejercicio. Este centro proporciona a las personas que llaman, la oportunidad de hablar con un fisioterapeuta acreditado que pueda responder preguntas sobre el ejercicio y recursos disponibles en el área de la
persona que llama. Conozca más en www.bu.edu/neurorehab/resource-center (disponible en inglés y en
español).

Además de los fisioterapeutas, los terapistas ocupacionales pueden ayudar a las personas con EP a un mejor manejo de sus actividades diarias, particularmente mientras la enfermedad progresa. Los terapistas ocupacionales pueden ayudarle a mantener la mayor movilidad posible con cualquier
número de actividades diarias- ya sea escribiendo, digitando, cocinando, manejando, bañándose, vistiéndose, arreglándose. Cambios en el trabajo y lugar de trabajo también caen dentro de la experiencia de los terapistas ocupacionales.

Un patólogo del habla y lenguaje evaluará y tratará cambios en el volumen de la voz y los patrones del habla. El programa del tratamiento de voz de Lee Silverman (LSVT por sus siglas en inglés), una terapia basada en evidencia para aumentar el volumen, es proporcionada por muchos terapistas. Los
patólogos de habla y lenguaje además evalúan las dificultades a la deglución. Disfagia es la dificultad de mover la comida desde la boca al esófago, requiere de una evaluación cuidadosa y tratamiento para evitar complicaciones por problemas al tragar.

Dieta

Se ha dado mucha atención al uso de antioxidantes para prevenir o disminuir el progreso de EP. Los antioxidantes son sustancias que remueven radicales libres tóxicos, los cuales son producidos por células del cuerpo dañadas o con estrés.
En las células estos radicales libres promueven algo llamado estrés oxidativo, una condición asociada al envejecimiento y pérdida celular. La sobreproducción de radicales libres y el estrés oxidativo pueden contribuir al desarrollo de EP. Antioxidantes como la vitamina E y la coenzima Q10, remueven
radicales libres para reducir los efectos del estrés oxidativo. Sin embargo, un estudio amplio publicado a principio de los 90s demostró que los suplementos de vitamina E no disminuían el progreso de la EP; de hecho, las personas con EP que tomaban suplementos de vitamina E enfrentaban una peor enfermedad
que los que no tomaron. Como resultado, los suplementos de vitamina E no están recomendados para personas con EP.
Además, otro estudio demostró que la coenzima Q10 no proporciona ningún beneficio clínico a las personas con EP comparado con placebo (tableta de azúcar). Sin embargo, los antioxidantes obtenidos a través de su dieta puede que sea de beneficio, e investigaciones en esta área continúan.

Una vista a los antioxidantes

A continuación, están las “súper comidas” que contienen altos niveles de antioxidantes y otras
vitaminas importantes:
– Uvas
– Bayas azules y rojas
– Nueces
– Vegetales verdes oscuro, como la espinaca, el brócoli, y la coliflor
– El camote (batata) y zanahorias
– Té, especialmente el té verde
– Granos enteros
– Lentejas, como las de soya, y guisantes negros
– Pescado: como el atún, el salmón, y las sardinas

Dependiendo de sus medicamentos prescritos, usted puede que necesite ajustar su dieta. Su médico y farmaceuta le dirán si sus medicamentos necesitan ser tomados a ciertas horas del día, con
o sin ciertos alimentos o bebidas. En algunas personas con EP una dieta basada en proteínas (ej. Yogurt, carne, etc.) pueden afectar la absorción de levodopa, un medicamento común para el tratamiento de EP. Además, si usted está tomando medicamentos que incluyan la levodopa, usted pueda que necesite ajustar el tiempo en el que toma los suplementos de hierro (si los toma), porque estos suplementos pueden afectar la absorción de levodopa en el tracto gastrointestinal.


Medicamentos para los Síntomas Motores de la EP

A pesar que no existe cura para la EP, existen muchas clases de medicamentos disponibles para el tratamiento exitoso de los síntomas motores durante el curso de la enfermedad. Asegúrese de hablar con su neurólogo o el especialista en trastornos del movimiento acerca de sus síntomas más
preocupantes y sus metas con la terapia médica. Algunos medicamentos trabajan mejor que otros para algunos síntomas específicos de la EP. Asegúrese de proporcionar a sus médicos una lista completa de sus medicamentos (prescritos y de venta libre) y cualquier suplemento vitamínico o nutricional que esté tomando.

Los beneficios de los medicamentos solo pueden ser obtenidos si usted tiene acceso a ellos y los toma según se le indica. Algunos medicamentos para la EP están disponibles en forma genérica a través de programas especiales, por lo que son de más fácil adquisición. Algunos medicamentos para la EP están
disponibles en forma de acción prolongada, lo cual permite dosis menos frecuentes o un horario para su toma más fácil.

Hable con su neurólogo o especialista acerca de su situación, así como de cualquier preferencia para obtener y tomar sus medicamentos. Recuerde que es importante revisar con su médico o farmaceuta los efectos secundarios de todos sus medicamentos, de ambos tipos prescritos y de venta libre, y como ellos interactúan con otros medicamentos o con el alcohol. Enfermeras, asistentes médicos, y farmaceutas son recursos extremadamente valiosos de información acerca de todos sus medicamentos, incluyendo: como deben ser tomados, los efectos secundarios, y como pueden interactuar con otros medicamentos.


Las Complicaciones Motoras

Las complicaciones motoras se refieren a las dificultades asociadas a la enfermedad y al tratamiento de la EP, que se desarrollan después de varios años de tratamiento sin complicaciones de la EP. Así como la enfermedad progresa, una persona con EP usualmente comenzará a desarrollar un tiempo “OFF” o apagado, cuando sus medicamentos no son suficientes para mantener un buen control de los síntomas
entre una y otra dosis durante el día. Las dosis y el tiempo de toma pueden ser ajustadas o se pueden agregar nuevos medicamentos para reducir el tiempo de inactividad. En la enfermedad avanzada, los periodos de inactividad pueden ser impredecibles y con menos respuesta a los cambios de medicamentos. El tratamiento con levodopa aumenta el riesgo de desarrollar disquinesias, o movimientos descontrolados, especialmente durante el periodo de máximo efecto de una dosis de levodopa. Las disquinesias pueden no ser problema, y muchas personas con EP prefieren tener algunas disquinesias con un buen control de sus síntomas motores a no tener disquinesias con un control parcial de sus síntomas. El desarrollo de disquinesias significativas y que interfieren con actividades de la vida diaria, son comúnmente el punto donde la cirugía es considerada.

Carbidopa-levodopa (Parcopa®, Rytary®, Sinemet®, Sinemet CR®, y genericos)

El tratamiento más efectivo para la EP es la combinación de medicamentos de carbidopa-levodopa, el cual tiene el objetivo de incrementar los niveles de dopamina en el cerebro, sustancia química deficiente en personas con EP. La levodopa reduce los temblores, la rigidez, y la lentitud de los movimientos en personas con EP idiopática. La Carbidopa previene que la levodopa sea procesada antes de alcanzar el
cerebro. Por lo tanto, el agregar carbidopa permite a levodopa a llegar al cerebro de manera más efectiva. La Carbidopalevodopa es típicamente iniciada en dosis bajas para evitar náuseas y vómitos, que pueden ocurrir cuando la dosis se aumenta muy rápido. La dosis va incrementando con el tiempo
según su tolerancia y hasta que se obtengan óptimos beneficios terapéuticos. Carbidopa-levodopa está disponible en los Estados Unidos como una tableta de liberación inmediata (Sinemet®), tableta de liberación controlada (Sinemet CR®), como cápsula de liberación extendida (Rytary®), una tableta que se desintegra oralmente (Parcopa®), y de forma genérica.

Ocasionalmente, las personas que toman Carbidopa-levodopa pueden que observen oscurecimiento inofensivo de la saliva, sudor, o la orina. Los efectos secundarios más preocupantes incluyen falta del sueño (la cual puede ser repentina), comportamiento impulsivo, alucinaciones, y confusión. La levodopa también contribuye al desarrollo de disquinesias.

Infusión de Carbidopa-levodopan (Duopa™)

Una forma alternativa de carbidopa-levodopa (Duopa™) fue aprobada por la FDA en el 2015. Esta es utilizada para personas con enfermedad más avanzada, cuyos síntomas ya no responden a la carbidopa-levodopa oral. En vez de tomar una pastilla, la persona con EP recibe carbidopa-levodopa en forma
de gel inyectable a través de una bomba de infusión. La bomba entrega el medicamento directamente al intestino corto a través de un tubo colocado quirúrgicamente. La ventaja de una infusión continua de carbidopa-levodopa es menos inactividad o “tiempo OFF” de la levodopa.

Los efectos secundarios de la infusión de carbidopa-levodopa son similares a aquellos de la carbidopa-levodopa oral.

Agonistas de Dopamina: Apomorfina (Apokyn®), Pramipexole (Mirapex®, Mirapex ER®), Ropinirole (Requip®, Requip®), Rotigotine (Neupro®).

Agonistas de Dopamina: son una forma un poco diferente de carbidopa-levodopa, en lugar de aumentar los niveles de dopamina en el cerebro, ellos imitan la actividad de dopamina. Estos medicamentos pueden ser administrados de forma única en los estadios iniciales de la EP, o junto a carbidopalevodopa y otros medicamentos de EP posteriormente.

Los agonistas dopaminérgicos están disponibles como formulaciones de liberación inmediata (Mirapex®, Requip®), o de liberación prolongada (Mirapex ER®, Requip XL®). Uno de los agonistas dopaminérgicos (Neupro®) está disponible como parche dérmico. Como con carbidopalevodopa, los agonistas dopamérgicos son típicamente iniciados a dosis bajas y aumentados según tolerancia hasta obtener beneficios terapéuticos óptimos.

Apokyn® (inyección de hidrocloruro de apomorfina) es un agonista de dopamina, pero su efecto es muy rápido y breve. También llamado medicamento de rescate, Apokyn® es reservado para personas con EP avanzada que tengan problemas con inmovilidad severa o períodos de “OFF o apagado” durante la terapia con levodopa. Apokyn® es administrado como una inyección subcutánea, usualmente por
un cuidador.
Los efectos secundarios de los agonistas de dopamina son similares a los de carbidopa-levodopa. Apokyn® en particular puede causar nauseas severas, así que debe de ser administrado con medicamentos que prevengan o reduzcan las náuseas.


Inhibidores COMT: Entacapone (Comtan®), Tolcapone (Tasmar®)

Los inhibidores COMT son usados algunas veces con carbidopa-levodopa. Como la carbidopa, ellos previenen que la levodopa sea descompuesta antes que llegue al cerebro. El resultado es un suministro más confiable de levodopa al cerebro, donde puede es convertida a dopamina. Los inhibidores COMT (Catechol-O-metiltransferasa) son prescritos usualmente para tratar los periodos de inmovilidad de la
terapia con levodopa. Entacapone (Comtan®) está disponible como una combinación en forma de tableta con carbidopalevodopa (Stalevo®) Algunas veces los inhibidores de la COMT pueden aumentar los efectos secundarios asociados a la terapia con levodopa. Otros efectos secundarios comunes de los inhibidores COMT son: dolor abdominal, constipación, y decoloración de orina.
Exámenes de sangre regulares para evaluar la función hepática son necesarios con el uso de tolcapone (Tasmar®)

Inhibidores Selectivos de la MAO-B: Rasagiline (Azilect®), Salfinamide (Xadago®), Selegiline (Elderpryl®, Zelapar®)

Los inhibidores selectivos de MAO-B (Mono Amino Oxidasa-B) bloquean la enzima MAO-B en el cerebro, la cual desintegra la dopamina. Esta es otra forma de aumentar los niveles de dopamina en el cerebro. Los inhibidores de la MAO-B pueden ser utilizados solos o junto con otros medicamentos para EP. Cuando son usados en los inicios de la enfermedad como único tratamiento los inhibidores de la MAO-B pueden retrasar la necesidad de la terapia con carbidopa-levodopa. Los inhibidores selectivos de la MAO-B pueden ser prescritos como complemento a la terapia con carbidopa-levodopa, particularmente en individuos que toman levodopa y experimentan una disminución en la duración de su efecto antes de la próxima dosis. Los inhibidores selectivos de MAO-B para la EP están disponibles como tabletas tragables (Azilect®, Eldepryl®) o tabletas masticables (Zelapar®).

Los efectos secundarios de los inhibidores selectivos de MAO-B incluyen nauseas, resequedad de la boca, mareos, constipación, y ocasionalmente, alucinaciones y confusión. Restricciones previas al consumo de alimentos que contiene tiramina (por ejemplo, quesos curados, vino rojo, y cervezas de barril) con los inhibidores selectivos de MAO-B han sido retirados por la los FDA. Sin embargo, los inhibidores selectivos de MAO-B pueden interactuar con otros medicamentos, como los antidepresivos,
los descongestionantes nasales, y medicamentos narcóticos para el dolor. Su médico o farmaceuta pueden ayudarle a entender estas potenciales interacciones.

Anticolinergicos: Benzotropina (Congentin®), Trihexifenidilo (Artane®)

Los anticolinérgicos son comúnmente utilizados como tratamiento adjunto a otros medicamentos en la EP. Los anticolinérgicos son prescritos para reducir el temblor característico de la EP o para aliviar los problemas asociados con síntomas de desgaste de la terapia con levodopa.

Efectos secundarios comunes de los anticolinérgicos incluyen alucinaciones, constipación, resequedad de la boca, y problemas urinarios. Como resultado, el uso de los anticolinérgicos es limitado a personas más jóvenes con EP (menores a los 70 años). Estos anticolinérgicos deben evitarse en combinación con antihistamínicos, ciertos medicamentos psiquiátricos, y el alcohol.


Otros Medicamentos

La amantadina (Symmetrel®), también utilizada para prevenir o tratar la influenza, es utilizada para disminuir el temblor en la EP, así como la rigidez. Es típicamente usada como medicamento
complementario a otras terapias para la EP. Además, es usada para disminuir la disquinesia o los movimientos involuntarios causados por la levodopa. Efectos secundarios comunes incluyen mareos, resequedad de la boca, constipación, sueños vividos, e hinchazón de los tobillos. La amantadina está
disponible en presentación de jarabe y en tabletas. Gocovri, es una forma de amantadina de larga acción, aprobada para el control de la disquinesia.

Droxidopa (Northera®) está indicada específicamente para tratar la hipotensión ortostática (disminución en la presión arterial al cambio súbito de posición corporal) en enfermedades neurológicas como la EP. Debe ser utilizada con precaución en personas con enfermedad cardíaca, ya que puede empeorar ciertas condiciones cardiacas. Efectos secundarios comunes incluyen, dolor de cabeza, mareos,
nausea, hipertensión, fatiga, fiebre, y confusión. Además, altas dosis de carbidopa-levodopa puede que interfiera con la actividad de la droxidopa. Otros medicamentos usados para tratar la hipotensión ortostática son la fludrocortisona (Florinef®) y midodrine (ProAmatine®).

Pimavanserin (Nuplazid®) es aprobado por la FDA para tratar las alucinaciones y delirios que puedan desarrollarse en etapas avanzadas de la EP. Puede causar hinchazón de los tobillos, constipación, y confusión. Aquellos con problemas en el ritmo cardiaco deben evitar consumir este medicamento.

Rivastigmine (Exelon®) es aprobado para la demencia asociada a la EP. Puede provocar náuseas, vómitos, y pérdida del apetito.


Cirugía

Estimulación Cerebral profunda

La Estimulación cerebral profunda (ECP) es un procedimiento neuro-quirúrgico para personas con EP
avanzada, que aún retienen una buena respuesta a levodopa, pero que han desarrollado fluctuaciones motoras significativas, incluyendo disquinesias. La ECP puede también ser utilizada para tratar el temblor resistente a medicamentos. Al estimular puntos específicos de los circuitos del movimiento a nivel cerebral, la ECP “re-estabiliza” el circuito, restaurando en algún grado el control normal de los movimientos. En la mayoría de casos, esto permite a la persona con EP a reducir sus dosis de
levodopa, y por tanto reducir sus disquinesias, mientras mantienen un buen control de los síntomas.

La ECP involucra el implante permanente de electrodos delgados, en ciertas áreas seleccionadas del cerebro. Una batería generadora de impulsos, muy parecido a los marcapasos cardiacos, es implantada debajo de la piel en el pecho o del abdomen. Los generadores de impulsos son conectados a un estimulador de electrodos a través de unos cables, los cuales son colocados por debajo de la piel del cuero cabelludo y el cuello (observe la imagen en la siguiente página). El procedimiento de la ECP está asociado con una pequeña posibilidad de infecciones, accidentes cerebrovasculares, hemorragias u otras complicaciones asociadas con la anestesia.

El equipo no es visible por debajo de la ropa, y no causa ninguna incomodidad en el diario vivir. Los electrodos son programados por una computadora para el máximo control de los síntomas, y las baterías pueden ser remplazadas en un procedimiento ambulatorio cuando sea necesario, típicamente
después de varios años. También existe la opción de baterías recargables. Su doctor puede discutir de esta otra opción con usted.

La APDA tiene un sitio web llamado “el ABC de la ECP” que provee información educativa acerca de la ECP. Vea el sitio web apdaparkinson.org/webinar/the-abcs-of-dbs/


Terepias Alternativas/Complementarias para Sintomas Motores

Aunque usted escuche acerca de tratamientos no convencionales para la EP, como masajes, acupuntura, y acupresión, hasta ahora el uso de estos tipos de tratamiento para el manejo de la EP no ha
sido apoyada por pruebas científicas basadas en la evidencia. Sin embargo, puede que usted encuentre los beneficios en conjunto con los medicamentos aprobados para la EP, basados
en la evidencia científica. Usted debe de discutir los posibles beneficios y contraindicaciones de estas opciones con uno o más miembros de su equipo interdisciplinario de salud.


Tratamientos para Síntomas No Motores de la EP

Las personas con EP experimentan síntomas no comunes, incluyendo depresión, ansiedad, problemas del sueño, u otras dificultades. Si usted está presentando cualquiera de estos problemas, asegúrese de hablar acerca de ellos con uno o más miembros de su equipo interdisciplinario de salud. Terapia de
medicamentos adicionales (más allá de aquellos que tratan los síntomas motores de EP) pueden ser de ayuda y pueden ser tomados en conjunto con sus medicamentos para la EP.
También, mantenga en mente el valor de su red de apoyo social. Tener una fuerte relación social es, muy simple, y buena para su salud. Los miembros de la familia y amigos también pueden jugar un papel fundamental en ayudarle a mantener su régimen de salud y a conservar un resultado positivo.
La investigación en EP continua, y nuevos tratamientos están en camino. En el capítulo final se discute acerca de las últimas investigaciones. Resultados potenciales en el horizonte, y los estudios clínicos. Además, proporciona recursos adicionales para personas con EP y sus familias.

Considere unirse a un Grupo de Apoyo

Participar en un grupo de apoyo es una forma maravillosa de recibir información práctica y educación
acerca de como vivir con la EP. Ademas, los miembros reciben el apoyo de otros quienes realmente entienden la enfermedad. La APDA posee una larga historia en desarrollar y mantener grupos de apoyo en comunidades a través de los Estados Unidos. Algunos grupos son organizados y operados por miembros, y muchos de estos grupos reciben guía y apoyo de trabajadores sociales, enfermeras, psicólogos, y otros profesionales de salud. Por favor visite apdaparkinson.org/community/ para encontrar grupos de apoyo en su área o llame a 800-223-2732 para recibir ayuda en español.